2 de noviembre de 2008

El huésped

el perro de una casa vecina gruñó y luego la puerta la viste estaba abierta. cuando quedaste frente a la puerta entendiste el gruñido y retrocediste junto a la pared de espaldas llorando tragando lágrimas ahogándote. el perro ladró tus pasos hasta que viste un largo zaguán y allí te quedaste allí te sentaste en el suelo en diagonal a tu casa y desde allí contemplaste otra vez el espacio negro que dejaba la puerta entornada. varias veces quisiste gritar levantarte y huir pero te quedaste aletargado con un hambre que empezó a dolerte tuviste que abrir el paquete de salados y comer con desesperación mientras el frío te laceraba los labios. en la penumbra del zaguán apenas iluminado por una reminiscencia de farol y luna apremiado en los ojos por el cansancio y el frío no pudiste hacer otra cosa que pensar y pensaste en los reposos ajenos en el sueño de todos los que dormían esa noche y deseaste que el frío en los ojos acabara en otros ojos que se abrían y te liberaban de ese suplicio que te parecía un sueño. pensaste en la distancia entre la puerta y el marco esa sombra estrecha que a veces se ensanchaba por la brisa y otras desaparecía y ese movimiento casi pendular se te figuraba un cuerpo respirando. te preguntaste qué forma tendría ese cuerpo oscuro si tendría ojos si acaso te miraban si estarían escrutando la entrada del zaguán tu humillación tu postura incómoda sobre el suelo tu rostro cansado y amoratado el rocío que se depositaba sobre tu pelo. a veces un brillo parecía revelarte esos ojos creías verlos clavados en ti inmóviles y no podías imaginar un rostro para esos ojos porque eran solamente ojos indomables huérfanos de órbitas pestañas párpados. te dormiste pensando que podrías ir hasta la puerta y abrirla encender la luz desvestirte y dormir. los ojos que habías creído ver desaparecerían nadie podría estar allí y al mismo tiempo sabías que sí estaba que deberías sí compartir tu casa y que serías incapaz de darle un nombre. que el huésped serías tú y no yo porque yo simplemente te esperaría hasta verte despertar desperezarte acercarte tímidamente a la puerta protegido ahora por la luz del día y dolorido en todo el cuerpo abrir esa puerta temblando y recibir mi bienvenida.




16 comentarios:

Miss Morpheus dijo...

¿Por qué no hay mayúsculas ni comas?
Puesto que intuyo que no haces nada si no es por una causa, releeré y seguiré pensando. Ahora bien, siéntete culpable de mis desvelos.

Un abrazo.

Arcángel Mirón dijo...

Me cuesta meterme en el texto debido a la carencia de comas y mayúsculas.

simalme dijo...

¿Qué escritor era el que escribió algo sin comas ni puntos?

Yurena Guillén dijo...

Hola Diego;
Personalmente, de los relatos tuyos que he leído, creo que es el que más me ha gustado. Libre de interpretación y cargado de oscuridad, muestras a un huésped que se cuela sin permiso y que al final se revela...
Ah! Un ejemplo de lo comentado anteriormente es Joyce quien escribió partes del Ulises, monólogos internos, sin puntos ni comas dotándolos de mayor fluidez.
Un abrazo

Anónimo dijo...

en medio de un sueño o de la noche cualquier cosa te puede parecer escalofriante ... el peor de los terrores....
pero ocurre como dices....uno se siente mas protegido con la luz del dia....en aquel tiempo en que tenia muchas pesadillas me pasaba eso...el dia me daba toda ls seguridad y el miedo no estaba.....
un gran besin!

Perséfone dijo...

Un tipo valiente, sin duda. En tales circunstancias lo último que hubiese sido capaz de hacer es ponerme a reflexionar.

Esa ausencia dela que hablan algunos, en mki caso, suma cierta tensión al relato.

Un abrazo.

Mixha Zizek dijo...

La escritura de las nuevas técnicas de escritura en tu texto es interesante, el encabalgar las imágenes y las frases... una escritura postmoderna con un monólogo interior cerrado. Como bien explicas Yurena los inicios se da en el Ulises...

Me gustó el relato,esa escritura caótica que determina el tema del texto...muestra el caos de los personajes, un beso


Me di el gusto de leer las entradas antiguas porque quería conocer tu blog, por allí hayarás algunos comentarios regados...

Tristancio dijo...

Leí el relato hace unos días. He vuelto a leerlo y releerlo hoy... He intentado ponerle los puntos y las comas al pensamiento (que no los tiene). Me he puesto a ambos lados de la puerta. He mirado con los dos (o tres) pares de ojos. Me he detenido en ciertas imágenes, en el frío, en el rocío que de tan frío no tiene nada de poético. En el hambre...

Interpretamos lo que leemos desde nuestras costillas. Pensamos en algún absurdo regreso a casa en una madrugada triste. Parece una casa ajena la propia casa.

Y yo parezco otro cuando me veo llegar, y no sé si dejarme entrar. De tan jodido que vengo.

(Seguro tú pensabas algo muy distinto cuando lo escribiste).

Un abrazo.-

Alberto Espejel Sánchez dijo...

por un momento pensé que esta entrada tendría la etiqueta de "sueños" pero no fue así

qué vertiginosa narración, a veces parece que habrá un efecto de desmayo al leer de corrido tu relato, no sé cómo explicarlo, es como si, al leerlo sin la presencia de esas comas ni puntos, se fuera un poco el aire (aún leyéndolo en silencio)

qué gigantezcas selecciones de cine tienes en el sidebar!!!

Anónimo dijo...

Yo también, pensaba que era un sueño...aunque no lo habías especificado.
Felicidades por cómo has "tensado" la historia y el ambiente creado.

Anónimo dijo...

Hola!
Mirando tu blog estoy segura de que te interesará esta pagina web en la que promocionan proyectos literarios, musicales, de fotografía... para que veas de lo que te hablo el enlace a un poeta que merece la pena ser leido, Rafael Sarmentero:
http://qualid.es/?id_pre=28
un saludo

Yurena Guillén dijo...

Gracias por el video de Yasuko Hayashi. Tenías razón. Cuando desaparecen los artificios del cine, sólo queda la magia de la voz.
Un abrazo.

Myriam M dijo...

Sabía que iba a ser "la mujer gris", me alegro de que te haya gustado también "birds in the night" (uno de mis favoritos). El libro quedó finalista de los Junceda en su categoría y es que Joan, el ilustrador, es muy muy bueno...

ya sabes el mail si quieres concretar algo más o darme alguna recomendación

un saludo,

Lilith

josef dijo...

Bien.... se escribe como se quiere y me parece bien mientras se sepa lo que se hace y nuestro amigo Diego Ribera lo sabe más bien que nadie. Un relato oscuro, casi sueño o pesadilla...Saludos!

Diego dijo...

Miss: el texto original fue escrito con una puntuación correcta. Sin embargo, luego pensé que una presencia extraña debía entrañar forzosamente un discurso extraño. Así, pues, manipulé la puntuación para representar gráficamente ese discurso extraño. Buena pregunta. Un abrazo.

Gilda: Pensé mucho en eso, pero finalmente me sometí a lo que el texto me pedía, aunque es cierto que su lectura sería más amena del otro modo. Un abrazo.

Simalme: hubo y hay muchos. Joyce fue el que lo llevó al extremo. Juan Goytisolo lo hizo, Saramago tiene una puntuació muy particular, Vargas Llosa también jugueteó con eso... en fin. Un abrazo.

Yurena: exacto, el famoso monólogo interior, la representación del pensamiento caótico. Pero no había escritura caótica en Joyce: a veces estaba un día entero con una sola frase. Un abrazo.

Sauvignona: no hay terror más grande que la oscuridad absoluta. Un abrazo.

Perséfone: aunque no siempre se sepan las reglas de puntuación, lo cierto es que cuando no están, esa situación nos trae desconcierto. Pues ese desconcierto en la lectura me pareció una excusa para ilustrar un desconcierto en la historia. Un abrazo.

Mixha: no creas, este tipo de escritura también está un poco pasado de moda. Gracias por tus visitas y tus comentarios. Un abrazo.

Tritancio: hace mucho de este relato, sinceramente no puedo recordar en qué pensé cuando lo escribí. He tapado ese recuerdo con demasiados símbolos y ahora no lo reconozco. Me hiciste caer en la cuenta de esto. Un abrazo.

Alberto: bienvenido. Sí, podría haber estado entre los sueños, estoy de acuerdo. Sobre los fragmentos de cine, son sólo algunos, pero hay tantos igual de memorables... Un abrazo.

Bruja: no, por el momento los sueños irán con el título nada imaginativo de "Sueño". Y con buena puntuación. Un abrazo.

Qualid: conmigo, te recomiendo que desconfíes de tu seguridad.

Yurena: has visto... hasta parece que llora. Un abrazo.

Lilith: es que "La mujer gris"... Claro que te comentaré más. Un abrazo.

Moderato: sólo "Diego" para los amigos como tú. Y entre nosotros... a veces no tengo idea de lo que hago. Eso sí, nada de todo eso lo pongo por escrito. Un abrazo.

Dejame que te cuente dijo...

ojos huerfanos de orbitas......ufff...
me hicistes recordar unos ojos que em daban miedo...
inquietante de neuvo tu relato...
me dejas imaginando de enuvo esos ojos...y ahciendome las mismas preguntas que me hacia entonces....

curiosa forma de escribir...que ahora he comprendido, tenia un porqué...

un abrazo Diego